Muchas personas afirman que nunca comerían carne sin cocinar, ya que consideran que es peligroso comer carne cruda. Sin embargo, posiblemente han degustado un buen salchichón o un jamón, han probado boquerones en vinagre, anchoas o salmón ahumado, es decir, alimentos que no han pasado por sartén alguna.
Los diferentes nutrientes pueden ser obtenidos de una gran variedad de alimentos, pero la carne contiene varios de los más significativos, los cuales permiten un buen funcionamiento del organismo humano, razón por la cual, existen maneras diferentes de consumir la carne, aunque comerla cruda implica algunos riesgos que aquí conocerás.
Propiedades de la carne cruda
Las propiedades de la carne cruda son realmente las propiedades de la carne en sí, antes de cocinar, por lo que, como ya sabíamos, la carne cruda representa una fuente importante de proteínas, que benefician la formación y reparación del tejido muscular, así como de tendones, huesos, cabello y piel.
Entre otras propiedades que posee la carne, se refiere a su peso, ya que entre el 60 y el 80 % es agua. Por otra parte, cuenta con las llamadas grasas monoinsaturadas que disminuyen las enfermedades cardiovasculares. Además, poseen alto contenido de vitamina B12, B6 y B1 además de E y A. Dependiendo del tipo de carne también obtienes de manera natural hierro y cinc.
Comer alimentos crudos está de moda
Ha surgido recientemente una corriente llamada alimentos crudos, la cual defiende el crudismo como un estilo de vida. Esto incluye alimentos sin procesar, sin cocinar y preferiblemente ecológicos.
Todas las personas han consumido ensaladas y saben de sus beneficios, pero qué pasa si comes carne cruda. La verdad es que algunos platos como el carpaccio o el tartar, cada vez más tienen mayor presencia en las mesas de los restaurantes de todo el mundo, pero todavía muchas personas no se atreven a consumirla.
Lo primero que debes tener en cuenta en el momento de comprar carne cruda, es que tiene que ser de primera calidad, ya que si no ha sido respetado el control o la cadena de frío, pueden contener microorganismos dañinos o toxinas perjudiciales para tu salud.
Por otro lado, la carne cruda tiene ciertos beneficios que pueden ser desconocidos. Cuando se cocina dicho alimento, la estructura de sus proteínas se modifica y se rompe, y pese a que así es más fácil de digerir, es probable que en el proceso pierda una parte de sus esenciales nutrientes.
Para las personas que tienen problemas con el colesterol, consumir carne cruda platos es ventajoso, ya que se evitan las frituras, los aceites y las grasas malas.
A qué sabe la carne cruda
Si alguna vez te has preguntado a qué sabe la carne cruda, te podemos decir que el sabor de la misma tiene un gusto metálico y sanguinolento con muy poco aroma. Al cocinar la carne se genera el sabor que se espera al originar los sabores familiares básicos, aromas asociados y sensación en la boca.
Según distintos paladares, encontramos distintas opiniones, ya que también hay personas que consideran que el sabor de la carne cruda es similar al de la carne cocida. Tiene un sabor más intenso que la carne cocida porque no ha sido procesada por el calor. Algunas personas que la comen dicen que sabe a pollo o a carne de vaca. Otros dicen que sabe a carne de caza, como los animales salvajes como el ciervo o el bisonte.
Cuáles son los riesgos de comer carne cruda
De acuerdo con la opinión de algunos especialistas en ciencia y tecnología de los alimentos, se puede considerar peligroso comer carne cruda, ya que los riesgos de ingerir esta clase de alimento se derivan de las bacterias o patógenos que se encuentran en el sistema gastrointestinal del animal que se consume.
Cuando se cocina la carne se están eliminando los parásitos y las bacterias que contiene la misma. En ese sentido, al consumir la carne cruda se conservan dichos microorganismos que pueden generar una intoxicación alimentaria.
Podemos entender que es peligroso comer carne cruda porque existe el riesgo de contaminación con los microorganismos principales como los parásitos de toxoplasma gondii y diferentes bacterias como la salmonela, el e.coli, la yersinia, el vibrio cholerae, el clostridium, la listeria monocitógenes y el campylobacter.
Las personas que comen esta clase de carne, lo hacen porque creen que es más saludable al conservar intactos los nutrientes y porque les gusta su sabor. Es verdad que la carne cruda conserva intactas todas las proteínas y varios enzimas que benefician los procesos metabólicos y además mantiene intactas las concentraciones de potasio, calcio y cinc, las dosis de vitaminas B12, B6, B3, B2, B1, E y A; así como la creatina y los distintos aminoácidos fundamentales.
Pero también mantiene su grasa natural, la cual es saturada y perjudicial en el caso de las carnes rojas. Sin embargo, cuando cocinas la carne solo se pierde una parte de un nutriente y no su concentración total, incluso lo que se altera en mayor proporción con la cocción son las enzimas y proteínas.
Comer carne cruda durante el embarazo
Consumir carne cruda o con poca cocción, así como embutidos durante el embarazo no es recomendable. ¿Qué pasa si comes carne cruda y estás embarazada? La respuesta a esta pregunta es que las mujeres que están en estado deben tener cuidado especial con la toxoplasmosis, la cual es una bacteria que se parece a un resfriado común y puede generar el aborto en los primeros meses de gestación o malformaciones durante el desarrollo del feto.
La mejor manera de prevenir el riesgo de contagiarse con el mencionado parásito es prescindir de la ingesta de carne cruda embarazo o poco cocinadas, por ejemplo, los embutidos, así como también frutas o verduras que no estén limpias cuidadosamente así como la leche cruda de cabra. Igualmente, evita estar en contacto con el excremento de animales domésticos como los gatos.
Qué carne es peor para comer cruda
La carne cruda de pollo representa un gran peligro para la salud. Dicha carne es la que más contaminada suele estar de acuerdo con los expertos. La bacteria que más prevalece en este animal es la denominada campilobacter, la cual produce más casos de intoxicación en Europa, asociados a la ingesta de carne cruda.
Igualmente, la salmonela y la escherichia coli son algunas de las bacterias que se encuentran generalmente en esta clase de carne.
Inicialmente, la carne que se comercializa es segura, sin embargo, en el caso del pollo, resulta bastante difícil impedir los peligros de intoxicación si no está bien cocinada. De hecho, el pollo poco cocinado trae sus riesgos. Cuando la carne se cocina poco el peligro es menos, pero igual existe.
Si te has preguntado cómo se contamina la carne, te podemos decir que en una gran parte de los casos dicha contaminación se genera en el matadero, en el momento de eviscerar los animales y se produce el contacto con las piezas internas. Es ahí cuando existe el riesgo de transferencia a la carne de las bacterias.
Cuál es la mejor carne para comer cruda
Con respecto a la carne de ternera (a manera de carpaccio o tartar), el riego es menor, pero no deja de ser arriesgado, sobre todo con aquellos productos que se elaboran en casa. Cuando se prepara esta clase de platos lo que se hace es comprar la carne y se tritura, razón por la cual, las bacterias posibles se extienden en todas las superficies.
Pero si te quieres arriesgar a preparar una receta de tartar o un carpaccio en tu casa, es fundamental que sigas algunas recomendaciones relacionadas con la seguridad alimentaria.
Lo primero es que la carne tiene que ser de excelente calidad, que haya aprobado los diferentes controles sanitarios, que se encuentre preferiblemente envasada al vacío y donde no pueda romperse la cadena de frío.
Si la carne se encuentra congelada y la descongelas, tienes que consumirla de manera inmediata, pero si es fresca se debe ingerir el mismo día de que la compres. Nunca debes exponerla a altas temperaturas o al sol, previamente a su consumo.
En cuanto a su preparación, es bueno que sea marinada con vinagre o limón, el cual actúa como un antiséptico, o con algunas especias como el curry, la pimienta y el jengibre, aunque dicho proceso no es suficiente para eliminar todos los posibles parásitos o las bacterias.
Otra recomendación es golpear con un mazo culinario antes de su consumo para romper las fibras y que pueda digerirse un poco mejor.
Qué personas no deben de comer carne cruda
Hay un grupo de personas de riesgo para las cuales es peligroso comer carne cruda y no deben evitar su consumo en la mayor parte posible:
- Quienes tengan las defensas bajas no pueden consumir carne cruda.
- Los diabéticos.
- Los enfermos crónicos de cáncer.
- Personas con enfermedades del corazón.
- Quienes padezcan de enfermedades autoinmunes o infecciones agudas o crónicas, ya que su sistema inmunitario se encuentra comprimido o deprimido o personas que toman medicinas que bajan las defensas.
- Tampoco deben comer carne cruda los niños, porque todavía tienen inmaduro su sistema inmunitario.
- Tampoco las personas ancianas porque dicho sistema se encuentra deprimido.
- Tampoco se recomienda el consumo de carne cruda a las mujeres embarazadas porque pueden transferir las infecciones al feto y provocar trastornos con peligro de aborto o malformaciones.
- De igual manera, no es recomendable que coman carne cruda aquellos adultos sanos que sufran gastritis o problemas digestivos que afecten al páncreas, al hígado, la vesícula o el colon, ya que no será bien digerida y pueden generar otras complicaciones derivadas de la patología de base y activadas a través de las bacterias o parásitos propios de la carne.
En resumen, comer carne cruda es un placer para algunos, algo repulsivo para otros, pero en lo que sí se está de acuerdo es que su consumo, cuanto más reducido, menos riesgos para la salud, y que hay determinados tipos de carnes, como hemos indicado, la del pollo, que no se debe comer cruda en ningún caso.
Cárnicas Ismael, mayorista de carne, tiene como una de sus máximas el estricta cumplimiento de la Normativas de Calidad y Sanidad en el tratamiento de las carnes, si quieres comprobarlo, puedes consultarnos en info@carnicas-ismael.com